jueves, 11 de octubre de 2007

la existencia del ser


us and them, and after all we're only ordinary men..
-pink floyd



Comprende el siguiente ensayo corto (de palabras, no ideas) tres dimensiones del hombre, las que cohabitan a lo largo de su vida, entre los multiples niveles que abarca el imaginario humano, que nace de la creencia en una existencia lineal (o parte de la creación de una deidad eterea).*

la esencia del ser humano esta en el crear...
formar hilos plateados de ideas, reflexionar en nuestras islas, sobre el tamaño del mar intangible a nuestro alrededor, soñar en cuatro dimensiones. Deconstruir el universo. Crear consiste en tomar ese hilo, transformarlo en síntesis, en materia bi o tridimensional y crear un canal directo con los elementos de los demás, dar con un lenguaje universal.

La inocencia del ser humano esta en el soñar...
tomar el espejo, mirar nuestro otro yo, viajar a otros paralelos, en el mundo que describió Platón. Sumergirse entre las nubes borrosas y enfocar, explorar los paisajes inverosímiles de la mente que sueña. Concebir una noción de nuestro co-existir en otros planos, a los cuales estamos atados en forma cíclica, bajo un efecto dominó.

La conciencia del ser humano esta en el tiempo...
surcar entre recuerdos, lineales, paralelos; idear un antes y un despues. Crear relaciones entre causa y consecuencia. Lógicas, falacias, sofismos. Enraizarnos en marañas, redes creadas por nosotros en moldes para masas, a las cuales nos enajenamos, olvidando su origen (achacandolo al sueño de un dios). Individuo vs. colectivo, stasis, revolución, guerra, tesis-antítesis-síntesis. Encerrarnos en una caja imaginaria y olvidar la importancia de los sueños, los cuales trazan nuestro rostro en el espejo, sus lineas y honduras, las marcas que el tiempo ya dejo con su paso; crear caminos y destinos propios, sin destruir los que otros dejaron al pasar.


*Nota del autor: la segunda dimensión del ser humano, podría ser el resultado de la suma de la conciencia de todos los hombres, algo similar a un mar uniforme y vasto, donde la noción del tiempo y el espacio desaparecen por un instante, permitendo al hombre reinventarse en infinitas posibilidades, sin apegarse a esquemas predeterminados.

viernes, 5 de octubre de 2007

Despierto (cinco minutos más), bip.. bip.. bip.. ahora sí despierto, imágenes borrosas, fuera de foco; siento el frio de la mañana, mis pies tocan tierra, rompen la burbuja de sueños que es mi cama. Camino despacio, aún es temprano, "te llaman, te llaman, telefono no deja de sonar", pienso en la coyuntura de otro cotidiano, con caracteristicas de quinto piso de edificio burocratico en una gris ciudad latinoamericana.

Miro mi cara en el espejo, va cambiando de colores, de formas, se derrite, se expande, se difunde en el reflejo y por un momento me contemplo desde el otro lado, donde todo se aprecia inversamente, donde las ideas son creadas de derecha a izquierda y los paralelos dejan de tener influencia en estos tropicos, de simultanea vida dulce-amarga.

Me duermo, soles y lunas giran constantemente sobre mi cabeza, incesantemente, mientras pienso en lo que debía hacer ayer (o hace muchos años), a las 00:01 de este tiempo creado por nosotros para hacer la vida tolerable y olvidarnos despertar.

Enciendo una vela; las olas del reflejo de la llama se difunden lentamente sobre la cama y la pared, van disminuyendo conforme se acercan a la ventana. El viento electrizante afuera, choca con las olas de una rojiza madrugada, que desprende el oxígeno combustionado del sol, visto a través de un prisma atmosferico, cuyos colores transformo en palabras, en este ejercicio literario sin sentido, acéfalo, incapaz de aterrizar.